Este libro es el la
continuación de Rock de Acá –los primeros
años- (2009), y en ambos volúmenes, el
periodista especializado Ezequiel Abalos, mediante la loable vía de la
autogestión editorial, se encarga de reconstruir los principales sucesos de los
comienzos del rock argentino mediante las voces de algunos de sus principales
protagonistas. En lo que concierne a este Rock de Acá, Volumen
2, el relato se centra en el período 1970-1975, delimitado por la
separación de Los Gatos, Manal y Almendra, los tres grupos principales de la
primera etapa del rock nacional, y que antecede a la aparición en escena de
decenas de bandas y solistas que marcarían a fuego esos primeros años de la
“música progresiva argentina” (tal como se llamaba al movimiento rock en ese
momento). Un período que tiene como punto culminante la despedida de Sui Generis en el Luna Park, el viernes 5 de septiembre de 1975, el primer hito
masivo del rock argento. En Rock de Acá,
Abalos cuenta la historia acerca de “como vino la mano” segmentando en bloques
temáticos más de 60 entrevistas realizadas por él mismo durante los últimos 20
años.
Así podemos leer, y/o escuchar, las anécdotas narradas por los pioneros
del rock de acá, porque este libro también viene acompañado por un cd, con casi
nueve horas de duración, un hallazgo documental que incluye 104 archivos en
formato Mp3, con la grabación original completa de los fragmentos seleccionados
de las entrevistas realizadas a figuras como Lito Nebbia, Moris, Pomo, Billy Bond,
Vitico, Javier Martínez, Alejandro Medina, Claudio Gabis, David Lebón, Black Amaya, Nito Mestre, Héctor Starc, Willy Quiroga, Rocambole, Miguel Cantilo,
Edelmiro Molinari, León Giego, Machi Rufino, Rodolfo García, Emilio Del Guercio, Gustavo
Santaolalla, o Ricardo Soulé –por citar solamente
algunos de los muchos etcéteras-; quiénes, mediante sus recuerdos, van hilando
la historia. Así, se narran sucesos clave del rock argentino de los ´70 como el
surgimiento y caída de Mandioca, el primer sello discográfico independiente en
nuestro país; la grabación de los dos primeros discos de Moris; el suceso de La Biblia de Vox Dei; como fueron los
tres primeros festivales B.A.Rock; el devenir artístico de Luis Alberto Spinetta en Pescado Rabioso e Invisible; los artistas que renegaban de la
potencia del sonido electrificado del rock y conformaban el Acusticazo; los
primeros viajes hippies al Bolsón; la ascensión de los grupos denominados
“pesados”, liderados por La Pesada, Pappo´s Blues y, luego, El Reloj; el
desastre producido en el Luna Park en 1972, cuando Billy Bond pronunció su
tristemente celebre “rompan todo”; el primer vínculo del rock con la política
en el Festival del Triunfo Peronista –cuando Cámpora ganó las elecciones de
1973-; la filmación de Rock Hasta Que Se Ponga El Sol, primer film
documental argentino de rock; el surgimiento de los primeros grupos en la veta
del rock sinfónico, como Espíritu o Crucis; la muerte de Tanguito… Todo esto
complementado con letras de canciones de la época, alusivas a cada segmento histórico.
Como bien describe el gran Pipo Lernoud en su prólogo, los músicos en este
libro cuentan todo acerca de “un tiempo
que fue inolvidable, en donde todo estaba por inventarse y en el que todo era extremo:
la música, la droga, la política, el amor… Días en los que parecía que,
efectivamente, la imaginación podía llegar al poder…” Aunque también ya se
vislumbraba, con la aparición de la Triple A, “el huevo de la serpiente” de la violencia parapolicial, síntoma -y
cruel anticipo de lo que vendría después-, y que implicaría persecución y
censura; algo de lo que la música rock argentina también fue víctima. Y si bien
Abalos optó por desgrabar en forma literal las declaraciones de cada uno de los
músicos entrevistados; esto quizás sea un punto criticable dado que, por
momentos, resulta un poco engorroso para leer. No obstante, se puede comprender
esta decisión periodística en virtud de preservar la espontaneidad del relato oral
de los protagonistas de esta historia. Por lo demás –y en especial en cada una
de sus acertadas introducciones a los segmentos- el trabajo de investigación documental
de Abalos se destaca a la hora de ubicarnos en el contexto histórico, y por lo efectivo
como presentación de cada uno de los relatos acerca de lo que pasó en esos
primeros años del género. Años de sueños, años afiebrados, y con el rock
argentino apareciendo como fenómeno cultural –aunque aun fuera un movimiento under- de una parte de la juventud de
nuestro país, de un sector emergente, en oposición a la pacata sociedad
argentina, de ayer, hoy y siempre…. Años de hippismo, últimos tiempos de ir a
naufragar a las plazas y los bares (en este punto, chequear el, ahora, cómico
relato de Pomo de cómo se la pasaba “yendo de gira”, de comisaría en comisaría,
por el único delito de usar el pelo largo), años de bohemia, de experimentación,
y de una búsqueda artística imparable, que incluiría la aparición de varios
álbumes inmortales –como Artaud, Pescado
Dos, Pequeñas Anécdotas Sobre las Instituciones, Color Humano, o Pappo´s Blues
Vol.2- que dejarían su sello,
metiéndose en la conciencia colectiva de una generación; mientras que varios
artistas importantes del género como Moris, Miguel Abuelo, Javier Martínez,
Claudio Gabis, Billy Bond, Edelmiro Molinari y su mujer Gabriela, Miguel
Cantilo y Kubero Díaz empezaban a elegir el exilio como vía de escape a la represión
y la censura, iniciando una sangría que seguiría hasta finales de la década del
´70, y que llevaría, finalmente, al rock argentino a un estado anémico, casi
terminal, del que solo se recuperaría con la aparición de la segunda oleada de
grupos post-Guerra de Malvinas.
Pero esa es otra historia, de la que,
seguramente, se ocupará más adelante Abalos en un nuevo capítulo de la saga de este
interesantísimo trabajo documental que viene desarrollando, y que encuentra con
este Volumen 2, un nuevo hito
periodístico que será disfrutado tanto por los viejos testigos, que conocen y
vivieron la historia, así como por aquellos entusiastas jóvenes neófitos que se
acercan al panteón de la historia del rock nacional por primera vez.
Emiliano Acevedo.-
1 comentario :
Gracias
Publicar un comentario